Cada vez que me pongo al volante de mi automóvil, tengo la costumbre de encender la radio para oír o escuchar lo que se cuece, digo oír o escuchar, porque lógicamente, dependiendo el tipo de circuito que realices, la atención que puedas prestar a lo que se comenta en el receptor se ve mermada por la atención que prestas a la conducción, y por lo tanto, no siempre te quedas con la copla, no obstante algo te queda.
Ayer, cuando salí del trabajo para irme a almorzar, tuve la oportunidad de escuchar los últimos retazos de una tertulia, faltaba poco para el informativo de las 14 horas, y al mismo tiempo el trayecto que realizo es relativamente corto.
Según llegué a comprender, se trataba el tema de la fusión de las cajas, y de la incoherencia del PSdeG , y principalmente en la persona de su Secretario General, se decía que no había una posición unánime, se hacía referencia a la posición clara de Abel Caballero, y a la no tan clara, más bien indefinición de otros líderes del PSdeG.
Se dijo que había una falta de liderazgo total, es más se dijo que con Touriño esto no pasaría, éste habría demostrado desde un principio y se dio algún ejemplo, su postura al respecto del tema en cuestión, incluso se comentó que Touriño hubiese dado un golpe encima de la mesa y no hubiese permitido que cada uno campase por donde le diese la gana.
No voy a entrar a cuestionar el tema de la fusión de las cajas, pero lo que me parece muy serio, por no decir muy grave, es que en un medio de comunicación que es líder de audiencia en Galicia, y además en horario prime time, se diga que el segundo partido de Galicia y con aspiraciones a gobernar en mayoría, carezca de liderazgo.
No critico los comentarios de los tertulianos, que ejercen su derecho de libertad de expresión, lo que critico es que la actitud de algunos dirigentes del PSdeG, haya provocado que algunas personas tengan esa sensación de carencia de liderazgo en el socialismo gallego y lo expresen abiertamente en un medio de comunicación.
Si diez meses después de haber perdido las elecciones, diez meses de oposición y ocho meses después de un Congreso que decidió quien debería llevar las riendas del PSdeG, lo que se ha conseguido es que se diga que la oposición socialista carece de fuerza y liderazgo, algo hay que hacer de forma inmediata para corregir el rumbo, y digo de forma inmediata, porque tras la dimisión de Touriño, inmediatamente hubo postulaciones para ponerse al frente del partido.
Uno de mis principios es que intentar llegar al poder, por llegar, y hacerlo de forma precipitada y poco meditada, es poco inteligente, pero nadie es perfecto y como humanos nos equivocamos, es hora de ponerse el traje de sabios y rectificar, porque ya se sabe que en política quien pone nota, quien suspende ó aprueba, es el ciudadano, y en los tiempos que corren el nivel de cultura, de conocimiento, y de información que maneja la ciudadanía, es un “poquito” más alto que unas décadas atrás.
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