domingo, 14 de marzo de 2010

Que no me hablen de lealtad.

Hay que tocarse los huevos, pasmao, estoy pasmao, por más vueltas que le doy sigo sin entender una mierda de los entresijos de la política.

Todo un número dos del PSdeG de Ourense, manda al carajo al partido y se va a la competencia, al PPdeG, y porque dice que es un “proyecto ilusionante”.

Y digo yo:

¿no tiene el PSdeG un proyecto ilusionante?.

¿qué hizo este señor para que lo hubiese?.

¿presentó propuestas para su elaboración?.

¿hicieron caso omiso de sus propuestas?.

¿es más fácil crecer en el PPdeG que en el PSdeG?.

¿tiene el PPdeG una hoja de ruta para llevar a Galicia a los más altos grados de desarrollo?

¿carece el PSdeG de capacidad para lograrlo?

¿el PSdeG es un partido sin rumbo, y que ha perdido el Norte?

¿a habido presiones internas para forzarle a dejar el PSdeG ?

¿a habido presiones externas que le han forzado al cambio?

¿es realmente una decisión totalmente voluntaria?.

Podría hacer más preguntas, que sumadas a las que se harán también más personas, seguro que ocuparían un libro de muchas páginas, y solo de preguntas, si añadimos las posibles respuestas y las diversas opiniones, lo más seguro que en lugar de un libro el resultado sería una voluminosa enciclopedia.

Y me sigo preguntando ¿dónde carajo está la ideología?, que no estés de acuerdo lo admito, pero pasarse a las filas contrarias donde teóricamente sus ideas están a 180º, me dice que no son precisamente las ideas las que mueven a algunos a entrar en política.

¿Cómo es posible que no se les vea el plumero a este tipo de personajes?.

Hasta que extremos llegará la ceguera de algunos dirigentes que no ven o no quieren ver que es lo que tienen a su alrededor.

Desde que se perdieron las autonómicas, y después de la inmediata dimisión de Touriño hasta ahora, hemos visto que una gran cantidad de tránsfugas han salido a la luz y le han dado por saco al partido, facilitando mociones de censura, y justo coincidiendo con la renuncia de Touriño a su acta de diputado y a la primera línea de actuación, salta éste caso que si cabe es todavía más sangrante que los anteriores.

Visto lo que hay, no queda más remedio que hacerse más preguntas:

¿habrá más sorpresas? ¿cuál será la siguiente?.

Me causan admiración los profundos ideales que tienen algunos, me provocan una envidia enorme ya que ni por asomo nunca seré capaz de llegar a tener semejantes convicciones, también puede ser que esa envidia que me sobreviene sea debida a que en lugar de ideales sean profundos los bolsillos que tienen algunos para llenarlos de sus ambiciones y codicias y yo no tengo sacos de esa capacidad.

Joder, y luego me hablan de lealtad, y una mierda, ¿lealtad a quién?, que no me toquen los huevos, que no confundan militante con hooligan que eso se está acabando, y si no lo saben ver, allá ellos.

Hace poco, un compañero pedía la baja en el partido totalmente desilusionado, pero no se iba a la competencia, seguirá siendo socialista desde fuera, sin el condicionante de unas siglas, porque los ideales no son sólo unas siglas, yo hasta admitiría que siendo de izquierdas se pasase a otro partido de izquierda ya que por lógica es más lo que nos une que lo que nos separa, pero pasarse a la derecha nunca lo hubiese admitido.

Estas cosas me desilusionan, y me traen a la memoria el título de un disco de Extremoduro, que no transcribo gracias a la poca educación que me queda.

También me recuerdan que sería mejor:




Aunque creo que es mejor tomárselo de otra forma:



FUERZA Y HONOR.

HASTA LA VICTORIA SIEMPRE.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Meu,no te has dado cuentaque los partidos politicos hoy por hoy son empresas con gestion de empresas...mejor dicho,son corporaciones, con afiliados(patrocinadores)a los que les pagan cifras potentes para trabajar "por el partido",por tanto es simplemente trabajo,los ideales se los dejan a las bases de los partidos..o por lo menos asi lo veo yo..un simple ciudadano

Miguel García dijo...

Tienes mucha razón. En el análisis y en las preguntas.
Al que se ha ido (a otro sitio) normalmente le escuchas cosas del tipo de: "lo hacemos todo mal", "el presidente/secretario general/alcalde no tiene ni idea"... Caray, hace un par de semanas lo hacía de p... madre...

En lo personal. Hay momentos en los que cuesta... claro que si. Antes de dar el paso y decidir afiliarme lo pensé mucho. Le dí muchas vueltas. Soy una persona que analiza mucho, que las cosas se hagan bien... haga quien las haga, y estaba seguro de que habría momentos en los que no me iban a gustar determinadas cosas o determinadas personas de la organización.

¿Cómo lo solucioné? Diciéndome a mi mismo que todo eso me daría igual. Que la organización era muy buena a largo plazo, que si algo no me gustaba intentaría cambiarlo. Que si creía que una persona no era la adecuada buscaría que me convenciesen de lo contrario o le ayudaría a tomar otras decisiones. Que, llegado el momento, intentaría apoyar a otra, de frente. Que, como bien decías, haría cosas para mejorar la situación (en la medida de las posibilidades de tiempo de cada uno).

Y que, por encima de todo, estaría orgulloso de lo mejorada que estaba la sociedad gracias a la organización. Cultura, sanidad, pensiones universales. Y ahora la protección de los dependientes (un cambio hercúleo, a diez años)...

Si me permites, José Antonio, hasta la victoria siempre!

Angus dijo...

Querido Miguel, claro que hasta la victoria siempre, pero hay veces que es difícil resistir.
Lo que más me duele, es que se desaprovecha día si y día también el verdadero potencial que hay en este partido que es la militancia de base.
Hoy he recibido un correo y me imagino que tu también donde se indica que sectoriales se han formado y a los que te puedes apuntar, al mismo tiempo informa de en que horarios va a estar abierta la sede.
Pero es que ni por activa ni por pasiva, se dan cuenta de que muchos tenemos responsabilidades laborales cuyos horarios no nos permiten compatibilizar con la actividad política, ¿para cuando la militancia sostenible?, tu sabes bien a lo que me refiero y conoces un ejemplo, ¿tan difícil es adaptarse a las nuevas tecnologías?, yo no se si falta voluntad o se tiene miedo a perder el control, en el primer caso sería decepcionante, y en el segundo implicaría inseguridad y miedo a perder el sillón o lo que es lo mismo desconfianza, y esa falta de confianza por parte de algunos, con el tiempo se convierte en recíproca, dando lugar a una organización débil, sin unidad de criterios, lo que con el tiempo la llevará al fracaso.
A mi personalmente no me importa reconocer los errores y los fracasos, pues de ellos se aprende y vuelcas tus fuerza en corregirlos.
Es verdad que los grandes problemas ocultan grandes oportunidades, pero también es verdad que en muchas organizaciones, hay miembros que forman parte del problema y no de la solución.

FUERZA Y HONOR.

HASTA LA VICTORIA SIEMPRE.

Cata dijo...

Un proyecto puede ser bueno pero nunca será realidad si la gente que lo desarrolla no lo es; así que, como en todo, las personas son lo más importante. En el caso de Ourense, por lo que he leído, hubo fallos en el trato que se dio al tal Eladio (al elegir a un secretario provincial que lo iba a sustituír sin hablar con él) y él no resultó ser precisamente un dechado de lealtad. Pero en cualquier caso, otro error de comunicación, otra falta de sensibilidad con las personas que traen consecuencias. La primera, de imagen, y ya veremos en qué queda todo en las municipales.
Por otro lado también he escuchado a alguno que no le extrañaba demasiado el giro de 180º, se ve que el hombre ya apuntaba maneras populares... quién elige a estos elementos y encima los promueve a cargos de responsabilidad desoyendo lo que dicen era un secreto a voces?
En fin, casos como éste o muy parecidos los conocemos todos, sólo que no han llegado tan lejos (o tan arriba). Pero no hay que permitir que contaminen el ambiente. Yo no lo permito, quiero caminar hasta la victoria siempre...aunque nunca llegue.